Parte Uno: Alabanza, Liberación, y la razón de la Liberación. Esto es posible, pero no necesariamente. Por tanto, es un resumen de agradecimiento por todas las veces que Dios lo libró a lo largo de su larga vida de servicio. Mi roca y mi fortaleza, y mi libertador: David apiló título sobre título al alabar a Dios. La obra de Dios sobre David era tan grande y amplia que no podía ser contenida en un título. Cuando sabemos que Él es nuestra roca y fortaleza y libertador y escudo y fuerte y Salvador, es natural que entonces confiemos en el completamente. La fe no depende totalmente del conocimiento, pero el correcto conocimiento de Dios da gran fortaleza a la fe. Salvador mío; de violencia me libraste: Cada título era significativo para David porque Dios cumplió el significado de cada título en la experiencia de David. Me rodearon ondas de muerte, Y torrentes de perversidad me atemorizaron.
Tiene alguna importancia quién haya sido el que recomendó la lectura de ese libro? Considere la siguiente recomendación que encontramos concerniente a los escritos de Isaías: Y he aquí, ahora os digo que debéis escudriñar estas cosas. Sí, un mandamiento os doy de que escudriñéis estas cosas diligentemente, porque grandes son las palabras de Isaías. El Salvador dio estas instrucciones a los nefitas, pero el mandamiento de escudriñar estas cosas diligentemente es un cometido que sigue vigente hoy en día. Isaías tenía una amplia aproximación de los tratos de Dios con sus hijos. Entendía el poder y los principios de Sión, o sea, la sociedad celestial, y vio la aplicación que tenía para su edad y para el futuro. Al mismo tiempo que fortalecía lo espiritual de su tiempo, profetizó acerca del administración de Sión para quienes serían llamados a efectuarlo.
Estaba insatisfecho con mi relación con mi novia y discutía frecuentemente con mis padres. El satanismo parecía reconocer el dolor y la rabia que yo sentía. Sangraba mucho pero eso no me disuadió. Quería dejarme una botana permanente en mi cuerpo. En un sentido filosófico, en realidad tiene algo que ver con la devoción hacia el diablo. La mayor parte de los satanistas creen en hacer todo lo que puedan para conseguir lo que quieren en la vida. Es algo que alimenta el egoísmo que hay en ti, lo que lo hace tan oscuro. Pero, en aquella época, sentía que al dios cristiano con el que había crecido, que debía ser bueno, no le importaba mi sufrimiento.