
Es así que debe encargarse de los quehaceres y el orden de la casa, mientras que trabaja para cumplir con la función de proveedor. De esta manera, aquellos padres que viven la monoparentalidad experimentan también miedos y frustraciones que vienen asociadas a la etiqueta de ser padre sin pareja. De por sí, ser padre soltero plantea numerosos retos y prejuicios. El reto que plantea la sociedad, hombres y mujeres, no es sencillo, pues así como se es machista y se piensa que la mujer solo debe ejercer el rol de ama de casa y criadora de los hijos, se piensa también que el hombre solo debe cumplir el rol de padre proveedor y resulta difícil salir de ese mandato social. Sin embargo, la maternidad es un sentimiento que no diferencia género o especie, de manera que un hombre soltero puede ejercer la paternidad encontrando un equilibrio entre el rol de madre y el del padre. Entonces, no solo se debe lidiar con una sociedad que no facilita la tarea del padre soltero, sino que también se deben sobrellevar los retos y dificultades de la crianza misma. El padre debe lograr identificarse con sus figuras paternas madre y padre de forma tal que pueda aportar a sus hijos una figura íntegra y de amor. De allí la importancia de tener una red de apoyo, bien sea de familiares o amigos.
El fortalecimiento de las familias es nuestro deber sagrado como padres, hijos, prole, líderes, maestros y miembros individuales de la Iglesia. La importancia de acerar en forma espiritual a las familias se enseña claramente en las Escrituras. Debemos entender que cada uno de nuestros hijos viene con variados dones y talentos; algunos, como Abel, parecen haber recibido los dones de la fe al nacer. Otros luchan con cada decisión que toman.
No seas uno de ellos y asume las cosas antes de que sea peor Al principio, no te sientes atascado. Por comodidad, por conservar todas las rutinas agradables de casa, por sortear el riesgo a sufrir que es alto y duradero, sobre todo a partir de cierta edad o porque sienten que no tienen derecho a una vida aparte después de ofrecerse a apoyar, emocional o económicamente, a una mujer. Desde varios frentes se alaban las virtudes de la soltería, la poligamia, las bondades del sexo y del ligue para la salud y se quita importancia a la seguridad de las parejas tradicionales. Un amor incondicional, o casi, en nuestra vida, es sin duda un valor que hay que apreciar. Y cuando no lo hay, se nota. John Gottman ha encontrado a los cuatro jinetes del divorcio: el acidez, la crítica, la actitud defensiva y el obstruccionismo poner muros Desde afuera, estos signos, recopilados por ' Business Insider ', son bastante claros. Seguramente tus amigos ya lo saben, ya a ver quién es el listo que saca el tema en tu presencia.