Mientras camina hacia donde la estoy esperando puedo verla hablar por teléfono tranquila y despreocupadamente. Marta Leon Nacida en Nicaragua y con una hermana menor, tuvo una infancia feliz y muy normal. Cuando tenía 17 años ella, su hermana, y su madre deciden seguir con su vida lejos de su padre, con el que rompen toda relación, debido a sus problemas con el alcohol. Pero esto no hace de Anielska una niña traumatizada o rencorosa, la relación con su hermana y con su madre siempre ha sido extraordinaria y fluida. Dos años después se enamora perdidamente esta vez sí de alguien que la corresponde de igual manera.
Mi camino al monasterio pasó por un grupo de Whatsapp Anielska encontró su camino en un monasterio de carmelitas. Por: Marta León Fuente: Aleteia Anielska es una mujer joven que como cualquiera viste jeans, calza zapatillas y lleva a la espalda una reducida mochila. Mientras camina hacia donde la estoy esperando puedo verla hablar por teléfono tranquila y despreocupadamente. Nada en ella hace pensar que dentro de tres días ingresara en un convento Carmelita, si Dios quiere, para toda la vida. Nacida en Nicaragua y con una hermana menor, tuvo una infancia feliz y muy normal.