
Hace unos años, el amigo o amiga que ligaba a través de una aplicación de citas era la excepción, ahora, la mayorías de solteros y solteras de tu grupo tienen un perfil en alguna de las decenas de apps para encontrar la pareja ideal, o pasar una noche de pasión. Sin embargo, también pueden convertirse en espacios en los que se produzcan situaciones de acoso sexual u otro tipo de violencia. Al final y al cabo, lo que pasa en la red es un reflejo de lo que ocurre en la sociedad. Las estafas y el acoso sexual se han abierto paso en las aplicaciones de citas, que aunque sean una herramienta para conocer gente, no hay que bajar la guardia ante situaciones de estafa o acoso. Todas las modalidades de acoso: grooming, sexting ciberbullying, sextorsión, etc. Normalmente, la plataforma suele actuar ante este tipo de violencia vetando al usuario en cuestión o sancionarlo.
Tinder, Match, Badoo, son algunos de esos sitios que ya vienen jugando un visible rol en las relaciones humanas en esta era digital y son visitados diariamente por millones de personas alrededor del mundo. El primer bofetada para lograr una cita o alguna conversación subida de tono fue junto. No podía instalar la aplicación en el móvil ni bajarla. No supe si estaba bloqueada en Cuba o si era mi celular el que anunciaba un problema. La primera escarceo resultó finalmente un fracaso.
Todo depende de tus objetivos, intereses, preferencias personales e incluso tu situación financiera. Después de todo, existen tanto plataformas gratuitas como de pago. Tinder no necesita introducción. Por cierto, Tinder últimamente lanzó un videochat para deleite de los aficionados a ligar a través de video. Si te gusta acertar pareja deslizando fotos para dar me gusta, Tinder es definitivamente tu disyuntiva. Meetic Cada perfil en Meetic es la historia completa de una andoba.